La meteorización es
la desintegración y descomposición de una roca en la superficie
terrestre o próxima a ella como consecuencia de su exposición a los agentes
atmosféricos, con la participación de agentes biológicos.
Existen dos tipos de
meteorización:
METEORIZACIÓN FÌSICAS
La meteorización física son
los procesos que dan lugar a la disgregación de la roca, son siempre físicos no
cambian la composición de sus minerales.
Existen 5 maneras de
producirse la fragmentación de la roca:
1. Gelifracción:
Es la rotura de las rocas debido
a la acción de cuña que realiza el agua al congelarse en el interior de las
grietas de la roca.
2. Descomprensión:
Es la expansión que
experimentan las rocas que se han formado en el interior de la corteza
terrestre cuando asciende a la superficie.
3. Abrasión:
Es el roce ocasionado sobre
las rocas por los pequeños clastos que son transportados por el viento, por
corrientes fluviales o por el oleaje.
4. Impacto:
Los golpes producidos
por la caída de rocas puede provocar la fracción, tanto de los materiales
caídos como de los que reciben impacto.
5. Termoclastía:
Es debida a las grandes
diferencias de temperatura que puede producirse entre la superficie de la roca
y su interior cuando se encuentran expuestas al sol.
METEORIZACIÓN QUÍMICA
Es el conjunto de los
procesos llevados a cabo por medio del agua o por los agentes gaseosos de la atmósfera
como el oxígeno y el dióxido de carbono.
Existen 4 tipos de
meteorización química:
1. Oxidación:
Algunos minerales, como los
sulfuros, reaccionan con el oxígeno atmosférico y forman óxidos e hidróxidos de
hierro, cobre, aluminio y cinc.
2. Carbonatación:
Es la adicción de un grupo
de carbonatos a la molécula de un mineral , por el contacto de agua que lleva
CO2 en disolución.
3. Disolución:
Se produce sobre los
minerales solubles, halita, silvina, carnalita y yeso.
4. Hidrólisis:
Es la rotura de la
estructura cristalina de un mineral por la acción de los iones hidrógeno e hidroxilo.
El suelo es resultado de la
interacción de cinco factores: El material parental, el relieve,
el tiempo, el clima, y los seres vivos. Los tres primeros
factores desempeñan un rol pasivo, mientras que el clima y los seres vivos
participan activamente en la formación del suelo.
1. El Material Parental o Roca Madre:
Es el sustrato a partir del cual se desarrolla el suelo. De éste se deriva directamente la fracción mineral del suelo y ejerce una fuerte influencia sobre todo en la textura del suelo.
Es el sustrato a partir del cual se desarrolla el suelo. De éste se deriva directamente la fracción mineral del suelo y ejerce una fuerte influencia sobre todo en la textura del suelo.
2. El Clima:
Influye en la formación del suelo a través de la temperatura y la precipitación, los cuales determinan la velocidad de descomposición de los minerales y la redistribución de los elementos; así como a través de su influencia sobre la vida animal y vegetal.
Influye en la formación del suelo a través de la temperatura y la precipitación, los cuales determinan la velocidad de descomposición de los minerales y la redistribución de los elementos; así como a través de su influencia sobre la vida animal y vegetal.
3. Los Seres Vivos:
Son el origen de la materia orgánica del suelo, y facilitan su mezcla con la materia mineral.
Son el origen de la materia orgánica del suelo, y facilitan su mezcla con la materia mineral.
4. El Relieve:
Afecta a la cantidad de agua que penetra en el suelo y a la cantidad de material que es arrastrado, sea por el agua o el viento.
Afecta a la cantidad de agua que penetra en el suelo y a la cantidad de material que es arrastrado, sea por el agua o el viento.
5. El Tiempo:
Es necesario para un completo desarrollo del suelo. El tiempo de formación de un pequeño volumen de suelo es muy largo (1 cm3 de suelo puede tardar entre 100 y 1000 años en formarse) pero su destrucción es muy rápida.
Es necesario para un completo desarrollo del suelo. El tiempo de formación de un pequeño volumen de suelo es muy largo (1 cm3 de suelo puede tardar entre 100 y 1000 años en formarse) pero su destrucción es muy rápida.
El suelo se clasificar según su textura: fina o gruesa, y por su estructura: floculada, agregada o dispersa, lo que define su porosidad que permite una mayor o menor circulación del agua, y por lo tanto la existencia de especies vegetales que necesitan concentraciones más o menos elevadas de agua o de gases.
El suelo también se puede clasificar por sus características químicas, por su poder de absorción de coloides y por su grado de acidez (pH), que permite la existencia de una vegetación más o menos necesitada de ciertos compuestos.
Los suelos no evolucionados:
Son suelos brutos, muy próximos a la roca madre y apenas tienen aporte de materia orgánica. Son resultado de fenómenos erosivos o de la acumulación reciente de aportes aluviales. De este tipo son los suelos polares y los desiertos, tanto de roca como de arena, así como las playas.
Los suelos poco evolucionados:
Dependen en gran medida de la naturaleza de la roca madre. Existen tres tipos básicos: ránker, rendzina y los suelos de estepa. Los suelos ránker son más o menos ácidos, como los suelos de tundra y los alpinos. Los suelos rendzina se forman sobre una roca madre carbonatada, como la caliza, suelen ser fruto de la erosión y son suelos básicos. Los suelos de estepa se desarrollan en climas continentales y mediterráneo subárido. El aporte de materia orgánica es muy alto. Según sea la aridez del clima pueden ser desde castaños hasta rojos.
En los suelos evolucionados:
Encontramos todo tipo de humus, y cierta independencia de la roca madre. Hay una gran variedad y entre ellos se incluyen los suelos de bosques templados, los de regiones con gran abundancia de precipitaciones, los de climas templados y el suelo rojo mediterráneo. En general, si el clima es propicio y el lugar accesible, la mayoría de estos suelos están hoy ocupados por explotaciones agrícolas.
III. COMPONENTES DEL SUELO:
El suelo, se compone de una parte inorgánica y una parte orgánica.
Componentes inorgánicos del suelo:
a) Gases y líquidos que ocupan los poros (CO2, O2, N2, agua, etc.)
b) Minerales (fundamentalmente carbonatos y silicatos) de distintos tamaños:
- Tamaño arena (diámetros de grano comprendidos entre 2mm y 1/16 mm)
- Tamaño limo (diámetros de grano comprendidos entre 1/16mm y 1/256 mm)
- Tamaño arcilla (diámetros de grano inferiores a 256 mm) Un suelo con un porcentaje equilibrado de los distintos tamaños es el más apropiado para la vegetación.
Componentes orgánicos del suelo:
a) Seres vivos (Bacterias, artrópodos, lombrices, hongos, algas, etc)
b) Restos parcialmente descompuestos de seres vivos muertos: HUMUS.
HORIZONTES DEL SUELO
Se llama horizontes del suelo a una serie de estratos horizontales que se desarrollan en el interior del mismo y que presentan diferentes caracteres de composición, textura, adherencia, etc. El perfil del suelo es la ordenación vertical de todos estos horizontes.
Clásicamente, se distingue en los suelos completos o evolucionados tres horizontes fundamentales que desde la superficie hacia abajo son:
Horizonte O, o capa superficial del horizonte A: es la parte más superficial del suelo, formado por hojas, ramas y restos vegetales.
Horizonte A, o zona de lavado vertical: es el más superficial y en él enraíza la vegetación herbácea. Su color es generalmente oscuro por la abundancia de materia orgánica descompuesta o humus elaborado, determinando el paso del agua arrastrándola hacia abajo, de fragmentos de tamaño fino y de compuestos solubles.
Horizonte B o zona de precipitado: carece prácticamente de humus, por lo que su color es más claro (pardo o rojo), en él se depositan los materiales arrastrados desde arriba, principalmente, materiales arcillosos, óxidos e hidróxidos metálicos, etc., situándose en este nivel los encostramientos calcáreos áridos y las corazas lateríticas tropicales.
Horizonte C o subsuelo: está constituido por la parte más alta del material rocoso in situ, sobre el que se apoya el suelo, más o menos fragmentado por la alteración mecánica y la química (la alteración química es casi inexistente ya que en las primeras etapas de formación de un suelo no suele existir colonización orgánica), pero en él aún puede reconocerse las características originales del mismo.
Horizonte D, horizonte R, roca madre o material rocoso: es el material rocoso subyacente que no ha sufrido ninguna alteración química o física significativa. Algunos distinguen entre D, cuando el suelo es autóctono y el horizonte representa a la roca madre, y R, cuando el suelo es alóctono y la roca representa sólo una base física sin una relación especial con la composición mineral del suelo que tiene encima.
SUELOS RESIDUALES
Los suelos residuales se originan cuando los productos de la meteorización no son transportadoscomo sedimentos, sino que se acumulan en el sitio en que se van formando. Si la velocidad dedescomposición de la roca supera a la de arrastre de los productos de la descomposición seproduce una acumulación de suelo residual. Entre los factores que influyen en la velocidad dealteración de la naturaleza de los productos de la meteorización están el clima (Temperatura ylluvia), la naturaleza de la roca original, el drenaje y la actividad bacteriana.
a) Seres vivos (Bacterias, artrópodos, lombrices, hongos, algas, etc)
b) Restos parcialmente descompuestos de seres vivos muertos: HUMUS.
HORIZONTES DEL SUELO
Se llama horizontes del suelo a una serie de estratos horizontales que se desarrollan en el interior del mismo y que presentan diferentes caracteres de composición, textura, adherencia, etc. El perfil del suelo es la ordenación vertical de todos estos horizontes.
Clásicamente, se distingue en los suelos completos o evolucionados tres horizontes fundamentales que desde la superficie hacia abajo son:
Horizonte O, o capa superficial del horizonte A: es la parte más superficial del suelo, formado por hojas, ramas y restos vegetales.
Horizonte A, o zona de lavado vertical: es el más superficial y en él enraíza la vegetación herbácea. Su color es generalmente oscuro por la abundancia de materia orgánica descompuesta o humus elaborado, determinando el paso del agua arrastrándola hacia abajo, de fragmentos de tamaño fino y de compuestos solubles.
Horizonte B o zona de precipitado: carece prácticamente de humus, por lo que su color es más claro (pardo o rojo), en él se depositan los materiales arrastrados desde arriba, principalmente, materiales arcillosos, óxidos e hidróxidos metálicos, etc., situándose en este nivel los encostramientos calcáreos áridos y las corazas lateríticas tropicales.
Horizonte C o subsuelo: está constituido por la parte más alta del material rocoso in situ, sobre el que se apoya el suelo, más o menos fragmentado por la alteración mecánica y la química (la alteración química es casi inexistente ya que en las primeras etapas de formación de un suelo no suele existir colonización orgánica), pero en él aún puede reconocerse las características originales del mismo.
Horizonte D, horizonte R, roca madre o material rocoso: es el material rocoso subyacente que no ha sufrido ninguna alteración química o física significativa. Algunos distinguen entre D, cuando el suelo es autóctono y el horizonte representa a la roca madre, y R, cuando el suelo es alóctono y la roca representa sólo una base física sin una relación especial con la composición mineral del suelo que tiene encima.
SUELOS RESIDUALES
Los suelos residuales se originan cuando los productos de la meteorización no son transportadoscomo sedimentos, sino que se acumulan en el sitio en que se van formando. Si la velocidad dedescomposición de la roca supera a la de arrastre de los productos de la descomposición seproduce una acumulación de suelo residual. Entre los factores que influyen en la velocidad dealteración de la naturaleza de los productos de la meteorización están el clima (Temperatura ylluvia), la naturaleza de la roca original, el drenaje y la actividad bacteriana.
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